¡A todos nos gustan las donas glaseadas! Son una deliciosa pieza de panadería que pueden servirse como postre, una sencilla cena o el complemento para tu desayuno de la mañana. ¡Conoce a continuación la receta definitiva para preparar unas deliciosas donas con glaseado!
Ingredientes
- Leche: el líquido activa la levadura. La leche entera es imprescindible para lograr una masa más tierna, o puedes probar el suero de leche. Las leches bajas en grasa o no lácteas funcionan en un apuro, pero las donas no son tan sabrosas.
- Levadura: puedes usar levadura seca activa o levadura instantánea. Si usa una levadura instantánea, su tiempo de ascenso será un poco más corto.
- Azúcar: el azúcar endulza las rosquillas, pero también alimenta la levadura, aumenta su actividad y ablanda la masa.
- Huevos: los huevos aportan estructura y sabor.
- Mantequilla: la mantequilla derretida promete un sabor mejorado.
- Sal y extracto de vainilla: ambos agregan sabor.
- Nuez moscada: un poco de nuez moscada es el ingrediente secreto de ese sabor acogedor y reconfortante de la panadería. Si alguna vez has hecho muffins con chispas de chocolate, ¡sabes que agrega un delicioso toque de sabor!
- Harina: la harina para todo uso es la estructura de la masa. Te sentirás tentado a agregar más y más harina a medida que mezclas la masa, pero no lo hagas. Quieres una masa muy suave y acolchada para donas suaves y acolchadas. La masa todavía puede ser ligeramente pegajosa. Al amasar, usa harina adicional en sus manos y superficie de trabajo.
Cómo hacer donas glaseadas
Déjame guiarte a través del proceso para que entiendas lo que estás haciendo. Las rosquillas caseras parecen un poco intimidantes después de mezclar los ingredientes secos y húmedos, pero te aseguro que realmente no lo son.
- Prepara la masa: la masa se une con el gancho de la batidora. También puedes hacer la masa a mano, pero requiere un poco de músculo del brazo. Después de que la masa se junte en el tazón para mezclar, amasa durante 2 minutos.
- Deja que la masa suba. En un ambiente relativamente cálido, la masa se eleva en unos 90 minutos.
- Golpea la masa para liberar el aire.
- Enrolla y corta en donas: enrolla la masa hasta 1/2 pulgada de grosor. Corta las rosquillas con un cortador de donas de 5 cm aproximadamente. Cubre 1 o 2 bandejas para hornear con papel de pergamino o una estera de silicona para hornear. Coloca las donas (¡y los agujeros de las rosquillas!) en la bandeja para hornear forrada, luego cubre ligeramente y déjalas reposar mientras preparas el aceite.
- Preparar el aceite: usando una olla de servicio pesado y un termómetro de aceite, calienta el aceite a 375 ° F (191 ° C). Coloca una rejilla de enfriamiento sobre otra bandeja para hornear.
- Fríe las donas: trabajando con 2-3 donas a la vez, cocina durante 1 minuto por cada lado. Retira con cuidado del aceite y colóquelo en la rejilla preparada. Repite con las rosquillas restantes. (Vea mi nota de receta sobre cómo hacer los agujeros de dona).
- Prepara el glaseado: en lo que las donas se enfrían, mezcla agua con azúcar glass hasta conseguir una consistencia líquida y espesa de color blanco.
- Cubre las donas: con ayuda de un tenedor, sumerge cada dona en el glaseado y da unos golpecitos para quitar el exceso. Deposita las donas en una rejilla para que caiga el glaseado sobrante.
¡Y listo! Así de fácil puedes preparar las mejores donas glaseadas caseras.